domingo, 1 de octubre de 2017

ANALISIS LITERARIO DEL POEMA “LA SOMBRA INQUIETA “
En el poema el personaje principal una chica artista que paseo dolorosamente por la vida y en el poema la refleja como una sobra inquieta, ya que se mueve y a su vez pasa desapercibida y en esa oscuridad se sumerge su dolor por no verse reconocida.

El poema “La  sombra inquieta es un poema de rima consonante, compuesta de dos partes de cuarto estrofas cada una las estrofas están firmadas por versos alejandrinos. Estas enamoran en el género poemario de la

ASPECTOS DEL ESTILO EN LA POESÍA DE GABRIELA MISTRAL

Aproximadas a la complejidad del mundo multiforme y proteico de la oración poética de la Mistral y tratar de penetrar en su ámbito es como situarse  en el punto matemático de un circulo en el comienzo totalmente oscuro y que luego va iniciando y ampliando paulatinamente su radio iluminatario a medida que intentamos su penetración , es como sumergirse con beatitud en un “regato” , explorar la vida que fluye en el fondo de esa agua estancada y escudriña el misterio de los setos subterráneos de un mundo ignorado



La Sobra inquieta
Flor, flor de la raza mía sombra inquieta,
¡qué dulce y terrible tu evocación!
El perfil de éxtasis, llama la silueta,
 Las sienes de nardo, I’habla  de canción.

Cabellera luenga de cálido manto,
pupilas de ruego, pecho vibrador;
ojos hondos para albergar más llanto;
pecho fino donde taladran mejor.

Por suave, por alta, por bella, ¡precita!
fatal siete veces; fatal, ¡pobrecita!,
por la honda mirada y el hondo pensar.

¡Ay!   Quien te condene, vea tu belleza,
mire el mundo amargo, mida tu tristeza,
¡y en rubor cubierto rompa a sollozar!





PARAFRASEO DE LA SOMBRA INQUIETA

Flor flor de la raza mía, sombra inquieta
¡que sutil y sensible es tu evocación
El perfil de éxtasis, llama la silueta,
 Las voces de nardo,  I’hablar de canción

Cabellera larga de cálido manto acogedor
Pupilas de despecho, pecho estremecedor
Ojos hondos para a cumular más dolor
Pecho sensible donde penetrar mejor

Por suave, por alta, por bella ¡Pobrecita!
Fatal mil y un veces fatal ella pobrecita
por la penetrante mirada y el sabio pensar

¡Ay! Quien te señale, sea tu esplendor
 Mire el mundo banal, y mida tu dolor
¡Y en un enrojecimiento rompa a sollozar!

 Toda la tristeza que lleva dentro, que se pueda desahogar